La semana pasada participé en una mesa redonda sobre literatura en la que se hablaba de la situación de los escritores latinoamericanos residentes en España. La mesa redonda me dejó bastante frustrada, en particular cuando se definió a América Latina como "un continente a la deriva". He de decir que los tópicos caían en auténtico chaparrón y, bastante molesta, preferí guardar silencio. Hoy Carmen Peire me envía este vídeo, donde la escritora nigeriana Chimamanda Adichie razona sobre los peligros del pensamiento único: me gustaría mucho compartirlo con vosotros.
(Tiene traducción, la podéis conectar con el botón que está debajo de la imagen, a la izquierda).
14 comentarios:
qué maravilla de vídeo...
Fabuloso! Sobre todo la idea de que el peligro de los esteretipos no es que sean falsos, sino que son incompletos. Cuántas historias únicas nos contamos cada día!!
Gracias por compartirlo.
Destacaría el vínculo que las historias únicas tienen con algún tipo de poder que inmoviliza, que no permite la identificación ni la comunicación con otros.
Y un dato, si se quiere, de forma narrativa: todo el discurso va encadenando historias únicas y su contracara, casi un gran relato como un collage de nuestro presente dominado por tantos discursos únicos... Impecable...
¡Gracias, Clara, por el video!
Besos,
Adriana.
Gracias Carmen y Clara por compartir el video. Muy interesante su charla y los toques de humor. Muy interesante y real esto de la historia única. Siempre tan de moda.
Quizá deberíamos escuchar también la historia del "continente a la deriva".
Adriana, qué bien verte por aquí. Sin duda es un tema que hay que verlo desde el punto de vista del poder, y también sería muy interesante estudiar qué tipo de relato son los que intentan escaparse de este patrón y qué destino tienen. Sí, el texto de Adichie es impecable, una lección de retórica.
La nota anterior es mia, se me patinó la firma...
Excepcional y muy sugerente. Es un placer escuchar su voz, admirar su gestualidad, su saber estar arropando un razonamiento impecable.
Parte de lo que quería comentar ya ha sido dicho "Sobre todo la idea de que el peligro de los estereotipos no es que sean falsos, sino que son incompletos."
Vengo desde hace meses manteniendo una discusión parecida a cerca de la posición de poder que mantiene "El Canon Occidental".
Muchos no me entienden cuando digo que la "educación sentimental" de los y las que hemos sido lectores precoces y tercos es "única". Y no me refiero a los modos de entender el enamoramiento, no. Pienso en la paleta toda con que pintamos nuestras emociones: básicamente masculina y blanca, aunque con pequeños matices sociales.
Hace tiempo que me di cuenta de que mi biblioteca era como esas tertulias de principios del siglo pasado: mucho hombre, mucho humo y alguna mujer generalmente muy masculina.
Se me dice, ahora, que eso de hombres y mujeres ya está pasado, que si no hay más mujeres en los cánones es porque no son buenas, que hay que leer a los "grandes" y yo replico como Chimamanda que el peligro no es que el Canon sea falso
sino que es incompleto y a riesgo de perderme apuesto por equilibrar esa tertulia que se encuentra en mis estantes con nuevas voces, no canónicas, de mujeres y otros animales.
Esto último, con el mayor respeto hacia los animales.
Un vídeo para compartir.
http://www.rtve.es/rss/videos/television/TE_SNOSTRO.xml
en el que ante una presentadora que no se pronuncia hablan los hombres.
Y una página de interés:
http://www.rtve.es/television/nostromo/
Gracias, Clara.
Qué gran escritora es Chimamanda.
Gracias por que oir en estos momentos las palabras de Chimananda,reafirman una lucha personal que con compañeros y en otra escala de valores (los mal llamados de clase) me posicionan felizmente a su lado.
El lunes ¡¡¡me van a oir!!!!
Un beso.
ROSA
Una pena la mesa redonda, el tema me interesaba, a ver si se puede hacer otra vez un poco mejor...
Un montón de razones para no caer en los pensamientos únicos, etiquetando razas, pueblos o personas.
Felicidades y gracias por compartirlo.
¡Me ha gustado mucho pasar por aquí!
Susi, gracias por tus comentarios, ojalá que vuelvas de visita a nuestro blog...
Precioso, preciosa, impecable...
Me ha pasado, esto de comprar historias únicas. Son facilonas y están siempre disponiblees, como los calditos knorr. Aunque en general dejan un sabor artificial en la boca, y una sed imperiosa de caldo de verdad.
Es verdad, Mariana, como en literatura, los tópicos siempre son empobrecedores...
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